"Tierra de la frontera", así es la traducción de la palabra Ucrania, país que bien pudiera ser el foco de un conflicto mucho más internacional de lo que a nuestros ojos pudiera ser. Vamos a intentar desgranar los orígenes de estas tensiones que han aflorado de un tiempo hacia aquí en este teatro de operaciones de la Europa central-oriental.
Sin caer en la pedantería, voy a realizar un pequeño análisis de la evolución de este país hasta nuestros días, haciendo hincapié en los últimos 100 años, esperando que ayude a entender mejor el porque de todas las distensiones que están aflorando en esta "zona caliente" de la vieja Europa.
Des de los tiempos de Demóstenes, Ucrania es conocida como "el granero de Europa". Zona de paso desde el desmembramiento del Imperio Romano de diferentes etnias, tales como rus, varegos, túrquicas y eslavos, es en el siglo IX cuando se comienza a gestar una identidad nacional bajo la etnia rus, ocupando a actual Ucrania, Bielorrusia y la parte occidental de Rusia europea. Se mantiene una cierta estabilidad, hasta que entran en escena el Gran Ducado de Lituania y el Gran Ducado de Polonia, anexionándose la zona de Ucrania y comenzando un proceso de catolización y latinización de la zona. Es aquí cuando los plebeyos ucranianos, oprimidos, buscan el apoyo de los cosacos, pueblo nómada, adscrito a la fe ortodoxa. Si a esto, le unimos que el sur de la península de Crimea está bajo influencia musulmana y gobernada por kanes musulmanes, encontramos una situación de guerra constante: católicos, ortodoxos y musulmanes.
De esto hace 500 años, y todavía se pueden ver estas tensiones étnico-religiosas en la zona este de Europa: Guerras de los Balcanes de principios de los años 90, Guerra de Kosovo, conflictos étnicos en la zona de Bulgaria y Rumania, tensiones entre las repúblicas surgidas del desmembramiento de la URSS, etc..
Todavía nos falta un actor entre tanto embrollo étnico; los tártaros, pueblos de origen túrquico, que hostigan la zona de Ucrania con constantes razzias en busca de esclavos.
Todo esto sufre un golpe de efecto, cuando la zona de Crimea, pasa al Imperio Ruso en el 1783, comenzando así un proceso de rusificación: se produce una repoblación con gente de habla rusa, proveniente del Imperio, supresión del lenguaje ucraniano y comienza un proceso de imposición de la identidad rusa zarista para con los ucranianos.
Todo esto producirá un desplazamiento de las élites ucranianas, creando un descontento entre los plebeyos ucranianos y los cosacos.
Tras un período, no sin distensiones, tras la I Guerra Mundial, el tratado de Brest-Litovsk entre las potencias centrales y Rusia, hace que ésta, conceda la independencia a Ucrania, pero la derrota de Alemania meses después dejó este tratado en papel mojado. Rusia quiere recuperar los territorios perdidos y uno de ellos era Ucrania. Ésta se vio inmersa en una guerra civil, entre rusos bolcheviques, rusos mencheviques, polacos. El Tratado de Riga de marzo de 1921 puso fin a una guerra que dejó un millón y medio de muertos y marcó las fronteras definitivas hasta la II Guerra Mundial. Ucrania occidental se incorporó a Polonia y ésta reconocía a la República Socialista de Ucrania que en diciembre de 1922 fue miembro fundador de la URSS.
Las directrices marcadas por Stalin en la elaboración del primer Plan Quinquenal soviético trajeron funestas consecuencias para la nación Ucrania que hoy día son una herida que supura en las relaciones entre los dos países. Stalin culpó a los agricultores de acaparar los cereales y comprometer los resultados de los objetivos de industrialización. En 1929 la lucha de clases se desató contra los kulaks, los campesinos acomodados. La resistencia de millones de campesinos a las requisas de la cosecha, supuso una represión feroz que supuso ejecuciones, encarcelamientos, torturas y deportaciones en masa. Todo esto propició lo que se conoce como la Gran Hambruna
Durante la II Guerra Mundial, Ucrania, debido a su puerto estratégico de Sebastopol y por las grandes reservas de cereal fue objetivo principal desde un principio por parte de la Wehrmacht alemana dentro de la llamada Operación Barbarroja. Tras un avance rapidísimo por parte del ejército alemán, rapidamente surgen en Ucrania, varias facciones que aprovechan la coyuntura para combatir a la URSS, a la Alemania Nazi o a ambos según surja.Se trata del Ejército de Liberación Ucraniano y del Ejército Insurgente Ucraniano, que combatirán en contra de los nazis en un primer momento, y luego pasarán a combatir al ejército rojo una vez el signo de la guerra ya se decantaba por el lado de la URSS.
Uno de los ultranacionalistas más conocidos fue Stepán Bandera, que dirigió la Organización de Nacionalistas Ucranianos, de tinte ultranacionalista y fascista, fue un principal colaborador de las fuerzas nazis de ocupación. La figura de Bandera, es importante, ya que en las manifestaciones de los últimos meses que se han dado en Kiev, su figura es un referente para los grupos ultranacionalistas-nazis ucranianos y anti-rusos.
continuará......
Firmado: Jorge (Coronel Mortimer)